Instrumentos de percusión: la verdadera historia

A continuación os contaremos la verdadera historia de los instrumentos de percusión. Aquí podrás conocer donde se origina el ritmo, y cuáles fueron esos primeros instrumentos de percusión ancestrales.

Además, relataremos de forma breve cuál ha sido el aporte de las diversas culturas al desarrollo y evolución de estos instrumentos.

Será un placer para nosotros que este artículo amplíe tus conocimientos en cuanto a la percusión musical, y si, tienes alguna duda, puedes libremente expresarla a través de los comentarios!!

Vamos a empaparnos de historia!!

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La percusión ancestral

Desde tiempos primigenios, la percusión es una de las actividades musicales que se inició con la civilización.

En los comienzos de la civilización, el hombre primitivo se comunicaba con otros seres mediante el toque, sacudido o percutido, de elementos de la naturaleza, todo ello para provocar sonidos y ritmos donde se daban señales como avisos de posibles enemigos, rituales religiosos, o para la actividad de la caza.

Es decir, utilizaba el hombre primitivo los instrumentos de percusión para comunicarse con sus dioses, también para recrearse en comunidad.

Prueba de ello, los arqueólogos encontraron hallazgos importantes sobre los instrumentos de percusión que utilizaban los primeros humanos, tales como tambores de arcilla, maderas y huesos para percutir, lo que mejor conocemos como instrumentos de entrechoque o idiófonos. Estos no necesitan tensiones adicionales para producir sonidos.

En las cuevas donde habitaba el humano primigenio, los arqueólogos descubrieron pinturas, escritos, grabados, y esculturas que dan fe de las actividades musicales que estos llevaban a cabo.

Podemos entonces afirmar que el ser humano, antes de hablar, se comunicaba a través del arte, y más específicamente mediante los instrumentos de percusión.

El humano primigenio utilizaba troncos rebajados como caja de resonancia para ser percutido con huesos de animales.

Siglos más tarde, a este tronco se le incorpora piel de animal, primer vestigio de la familia de instrumentos membranófonos, para comenzar a modelarse lo que en adelante conoceríamos con el nombre de Tambor, que se ejecutan con membranas tensadas. 

A medida que evoluciona la civilización, también lo hacen los instrumentos musicales, y, en el caso que nos interesa, los instrumentos de percusión. El descubrimiento del hierro da impulso al desarrollo de los instrumentos idiófonos, como cencerros y esquilos.

Con el pasar de los siglos, comienzan a aparecer las clasificaciones de los instrumentos idiófonos y membranófonos, y a continuación os dejamos una de ellas.

Clasificación de los instrumentos de percusión

Los instrumentos idiófonos se clasifican en:

Kalimba o Samza

• Instrumentos de percusión de entrechoque: estos son pares de instrumentos que se manejan con las dos manos, como las castañuelas, las claves, los címbalos, o las maracas.
• Los instrumentos de percusión simple, como las campanas, la marimba y el vibráfono.
• Los instrumentos de percusión de sacudido, como son las sonajas y los chekeres.
• Los instrumentos de percusión pulsados, como lo es la Kalimba o Samza.
• Los instrumentos de percusión frotados, como la cuica y la zambomba.

Con respecto a los instrumentos membranófonos, estos se clasifican según el material con el cual hayan sido elaborados, la forma que tengan, el número de membranas que utilice, la manera como se encuentran colocadas y sujetadas las membranas, y la forma de ejecutarlos (si es con las manos o con fricción).

Existen instrumentos de cuerdas percutidas como los salterios, que por evolución dará a luz lo que conocemos como clavecín, y éste dará lugar al piano.

De las clasificaciones anteriores se derivan familias de instrumentos de percusión, entre las cuales tenemos:

• Los Gons: originarios de la china milenaria
• Las sonajas como cascabeles, cabazas, o panderetas entre otros.
• Los instrumentos de percusión de metal, como el triángulo, los platos, los cencerros, o las cortinas, entre otros.
• Los instrumentos de percusión de madera, como las castañuelas, el guiro, la caja china, o las claves entre muchos otros.
• Los instrumentos de percusión de lámina, como el xilófono, la lira, la marimba, el vibráfono y muchos más.
• Los instrumentos de percusión de campana en todos sus modelos y tamaños.
• Los instrumentos de percusión de membranas, como los timbales sinfónicos, las tumbadoras, el tambor, los bongos y muchos más.
• El moderno instrumento de percusión como lo es la batería, que incluye: bombo, caja, toms y platillos.

Europa y los instrumentos de percusión

Membranófono

En Europa, la historia de estos instrumentos se desarrolla en dos vertientes: una acerca de los instrumentos de la música étnica y popular, y otra con respecto a los instrumentos de percusión sinfónica.

No fue hasta la llegada del siglo XX cuando se comienza a analizar y clasificar la evolución de los instrumentos de percusión de origen étnico y popular.

Clasificaciones éstas que surgirán a partir de la localización geográfica de origen de los mismos, los cuales poseen características propias de cada cultura natal.

La esencia real de los instrumentos de percusión se origina con la historia de los pueblos, y sobre ello existen testimonios y escritos realizados por el pueblo, y más recientemente por etnomusicólogos, los cuales se han encargado de recoger mediante investigaciones la tradición oral de los pueblos y su memoria ancestral. 

Como ejemplo de ello tenemos instrumentos como el djembè africano, los tambores de batá, afro-cubanos, los steells-drums de Trinidad, los panderos indios, los palos de lluvia mejicanos, o el cajón peruano.

Estos instrumentos tendríamos que incluirlos en las clasificaciones anteriormente señaladas, aún a pesar de ser clasificados como Instrumentos de percusión exóticos y étnicos. 

En el caso del djembè, los panderos y los tambores de bata, estarían clasificados como instrumentos membranófonos, y específicamente los tambores de bata pertenecerían a los llamados instrumentos de percusión bimembranófonos por poseer dos membranas o parches percutibles, a diferencia del djembè y las tumbadoras.

Podemos concluir entonces que los instrumentos de percusión han sido, desde sus inicios, la columna vertebral de la música y de la evolución de nuestra civilización.

Mediante estos instrumentos se desarrolló la organización tribal que dio pie a la organización del trabajo, de la religión, y de las crudas guerras de conquista del territorio.

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